Mason Capital vuelve a instar a Grifols a reconsiderar la dimisión voluntaria de Dagá
El fondo ha vuelto a lanzar una sugerencia a la farmacéutica catalana para reconsiderar la dimisión del consejero, acusándolo de provocar la destrucción del valor de la compañía tras la retirada de la canadiense Brookfield.
4 dic 2024 - 16:42
El fondo Mason Capital ha instado en una nueva carta enviada este miércoles al consejo de administración de Grifols a reconsiderar su rechazo a la dimisión voluntaria de Tomas Dagá Gelabert, actual consejero de la firma catalana bajo la categoría de otro externo, “dado su historial de destrucción de valor”.
En concreto, la entidad, titular del 2,1% de las acciones de clase A de Grifols, ha pedido al consejo de la firma catalana que abordara “su deficiente gobierno corporativo y su historial de destrucción de valor para los accionistas aceptando la dimisión del señor Dagá”, que, según la misiva a la que tuvo acceso Europa Press, ya habría ofrecido “voluntariamente”.
En este contexto, el fondo ha solicitado la divulgación de información “importante” sobre Dagá, quien es miembro del consejo desde hace casi 25 años y el asesor más cercano de la familia Grifols, para que los accionistas de la firma catalana conozcan mejor su relación con ésta y puedan tomar una decisión informada “sobre la idoneidad de su permanencia en el consejo”.
Mason Capital ha detallado que desea “hacer un seguimiento” de la carta que mandó el pasado 19 de noviembre. “Reiteramos y modificamos nuestras peticiones para que Grifols revele la siguiente información para que los accionistas y todos los miembros del consejo puedan entender mejor la relación entre Tomás Dagá y Grifols”, ha pedido el fondo.
Grifols ha respaldado la función de Dagá como consejero de la empresa
Entre otras cuestiones, Mason ha destacado que quiere ver “los honorarios pagados a Osborne Clarke España por Grifols durante los últimos quince años y las cantidades recibidas por el miembro del consejo, Tomás Dagá, de Osborne Clarke España durante el mismo periodo”.
Adicionalmente, ha requerido a la firma catalana que comunique el porcentaje de participación de Tomás Dagá en Osborne Clarke España durante cada año del mismo periodo de quince años, así como lo que posee en el family office Scranton, ya sea directa o indirectamente a través de Fatjo.
“Hasta que los accionistas y todos los miembros del Consejo no tengan acceso a la información solicitada, no podrán tomar una decisión informada sobre la idoneidad de la continuidad de Tomás Dagá en el consejo”, ha indicado Mason.
Por ello, Mason ha defendido que el consejo puede demostrar que es independiente de Tomas Daga aceptando su dimisión, y la revelación de los puntos anteriores no hará sino reforzar la necesidad de hacerlo. “La continua falta de divulgación hablará por sí misma”, ha concluido.
Mason prepara una campaña para renovar el consejo
Mason Capital está preparando una campaña para renovar el consejo de administración de la compañía de hemoderivados, que pasa por la salida de Tomas Dagá Gelabert, actual consejero de la firma catalana bajo la categoría de otro externo, tras la retirada de Brookfield, según han confirmado en fuentes conocedoras de la negociación a Europa Press.
En este contexto, marcado por la retirada de la potencial oferta de Brookfield, el fondo exigió recientemente en otra carta a Grifols incorporar a Paul Herendeen a su consejo de administración como consejero independiente, que sería designado por el grupo de accionistas minoritarios formado por Flat Footed, Mason Capital y Sachem Head Capital Management, que poseen una participación conjunta que representa el 7,72% de las acciones de tipo 'A' de la firma catalana.
Grifols, de su lado, ha respaldado a su consejero Tomás Dagá ante el plan del fondo Mason Capital de renovar el consejo de administración de la compañía de hemoderivados, una campaña que pasa por la salida de este miembro del órgano de gobierno de la firma catalana, tras la retirada de Brookfield.
En concreto, según han señalado a Europa Press en fuentes de la compañía, Dagá ha contribuido “decisivamente a convertir a Grifols en la compañía global que es hoy, con unas ventas previstas de 7.000 millones de euros en 2024”.