Entorno

Tramadol y paracetamol: el matrimonio analgésico que se ha vuelto una mina de oro

El uso combinado de estos dos fármacos se ha duplicado en diez años y ya representa el 53% de las dosis diarias de analgésicos opioides que se consumen en España. Hoy, al menos 25 laboratorios lo han incorporado en su catálogo.

Tramadol y paracetamol: el matrimonio analgésico que se ha vuelto una mina de oro
Tramadol y paracetamol: el matrimonio analgésico que se ha vuelto una mina de oro
El uso creciente del tramadol con el paracetamol se debe a la tendencia al alza de la polifarmacia o, lo que es lo mismo, del número de pacientes que requieren tomar una gran variedad de medicamentos al día.

Marc Amat

9 may 2024 - 05:00

Casi blancos, alargados, biconvexos y ranurados en una cara. Este es el aspecto que presentan la mayoría de comprimidos de tramadol con paracetamol que se pueden encontrar hoy en las farmacias españolas. Se trata de una combinación de fármacos que, juntos, están indicados para el tratamiento sintomático del dolor moderado o intenso. Los médicos cada vez lo recetan más. De hecho, en cuestión de diez años, su consumo se ha duplicado hasta el punto de convertirse, de largo, en el principio analgésico opioide más consumido en España, según datos de un estudio reciente de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). Hoy, el 52,69% de las dosis diarias administradas de analgésicos opioides son de tramadol con paracetamol.

 

La aceleración del consumo de este matrimonio farmacológico empezó a mediados de la década de los 2000. En 2010, consiguió superar la administración de tramadol solo, que hacía años que estaba postrado en el trono. Desde entonces, ha seguido su tendencia al alza. “En líneas generales, ha habido un incremento en el uso y la prescripción de todos los grupos farmacológicos analgésicos, entre los que están los opioides menores, como el tramadol combinado con paracetamol”, confirma a PlantaDoce Isaac Peña, especialista en anestesiología y reanimación del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, donde coordina la Unidad del Dolor Crónico.

 

Según el experto, el uso creciente del tramadol con el paracetamol se debe a la tendencia al alza de la polifarmacia o, lo que es lo mismo, del número de pacientes que requieren tomar una gran variedad de medicamentos al día. “El motivo es bastante evidente: el envejecimiento de la población”, sentencia. “Este fenómeno se traduce en una mayor prevalencia de patologías degenerativas, como la artrosis, además de un cambio radical en el estilo de vida y las expectativas de la llamada tercera edad”, continúa. En este contexto, los analgésicos combinados facilitan al paciente la administración de los medicamentos, además de que tienen altos índices de “efectividad, seguridad y eficiencia”.

 

 

 

 

En junio de 2018, los laboratorios Stada enviaron una circular a los colegios oficiales de médicos. Les informaban que ya tenían listas dos nuevas versiones de su tramadol con paracetamol. En diciembre de 2019, Normon también se unió a la fiesta anunciando dos nuevos formatos de la misma combinación de fármacos.  En enero de 2023, Kern Pharma hizo el mismo movimiento. “De esta forma, seguimos consolidando nuestra presencia en el ámbito del dolor”, explicó en un comunicado. Son solo tres ejemplos que demuestran como, en los últimos años, los laboratorios farmacéuticos han apostado por aumentar los formatos de esta solución, sabiendo que cada vez se consume más en España.

 

Según cálculos de PlantaDoce, hay al menos 25 laboratorios que comercializan el tramadol y el paracetamol de forma combinada en el país. En total, abastecen las farmacias con casi cincuenta presentaciones diferentes, ya sea con el nombre descriptivo Tramadol / Paracetamol o con apodos comerciales, como Zaldiar, Captor, Clanderon, Pazital, Paxiflas o Diliban. Entre los laboratorios que apuestan por esta combinación están desde Ferrer, Gebro Pharma o Cinfa hasta Ratiopharm, Sandoz o Teva.

 

 

Más allá del consumo creciente generalizado de analgésicos, hay varios factores que explican el aumento de la prescripción de esta combinación. “En primer lugar, ambos medicamentos son ampliamente reconocidos por su eficacia en el alivio del dolor, y su combinación puede ofrecer sinergias que potencien sus efectos analgésicos”, analiza para este medio Peña, que también es codirector del Máster en Tratamiento del Dolor de la Universidad de Sevilla (US). Según identifica, otra de las claves principales del uso de combinaciones o asociaciones es la adherencia al tratamiento. “Tenemos que tener en cuenta que el perfil estándar del paciente ya tiene otros tratamientos crónicos”, recuerda.

 

 

El uso de esta combinación ofrece beneficios en el manejo del dolor causado por diversas patologías, aunque generalmente se trata de enfermedades degenerativas. “El paracetamol actúa clásicamente como analgésico y antipirético, mientras que el tramadol es un opioide de acción central que proporciona un efecto analgésico más potente en casos de dolor moderado a severo”, describe Peña. Juntarlos en un solo comprimido, conlleva beneficios: “Su sinergia permite una reducción de la dosis de cada componente individual, lo que puede disminuir el riesgo de efectos adversos, además de mejorar el cumplimiento del tratamiento”, destaca.

 

 

Aunque el paracetamol y el tramadol es la combinación analgésica opioide más consumida en España, no es la única pareja que baila en la pista. “Existen otras combinaciones de analgésicos que son comúnmente prescritas para el tratamiento del dolor agudo y crónico”, recuerda el experto. Lo ejemplifica citando las combinaciones de codeína con paracetamol, ibuprofeno con codeína o dexketoprofeno con tramadol. En un futuro, habrá más. “Las asociaciones de moléculas son un campo en continuo desarrollo por las ventajas que aportan, y se esperan nuevas propuestas como el tramadol con celecoxib para el tratamiento del dolor agudo”, cita el profesional.