Grifols vuelve al ‘business as usual’ y descarta una ampliación de capital
La compañía de hemoderivados ha asegurado que, al cancelarse la Oferta Pública de Adquisición (opa) por parte de Bookfield, regresa con los mismos objetivos que tenía desde antes y asegura que no habrá ninguna “gran venta”.
29 nov 2024 - 09:54
Grifols retoma su hoja de ruta. La compañía, protagonista en la última semana por las idas y vueltas con el fondo canadiense Brookfield, asegura que sin la Oferta Pública de Adquisición (opa) sobre la mesa, vuelve a focalizarse en el incremento del negocio y la reducción de su deuda.
“No hay plan B ni plan C, volvemos al business as usual con el foco en el negocio”, aseguró Nacho Abia, consejero delegado de Grifols en una conferencia. El directivo, al frente de la farmacéutica desde el pasado abril, despeja así dudas sobre el futuro de la compañía ahora que Brookfield descartó la opa.
Los objetivos de Grifols pasan por seguir manteniendo el buen ritmo de sus resultados financieros en un año convulso para la compañía. Esta semana, la empresa perdió 1.300 millones en Bolsa al conocerse la cancelación de la opa y a las acusaciones del fondo bajista Gotham City sobre la credibilidad de la compañía catalana.
Grifols, que cerró los nueve primeros meses con resultados positivos tras las pérdidas del mismo periodo del año anterior, augura un buen cierre de ejercicio en términos financieros. “Vamos camino a finalizar un año excelente, con crecimientos a doble dígito y un resultado bruto de explotación (ebitda) de entre un 20% y un 25%”, subrayó Abia.
Grifols aseguró estar más preocupado en refinanciar su deuda que en posibles grandes operaciones
La compañía de hemoderivados se afianza en el ebitda para reducir su endeudamiento y confía en que no tenga que hacer una ampliación de capital. El directivo insistió también en que no habrá grandes operaciones de inmediato.
“La dirección trabaja para que la ampliación de capital no sea necesaria y también descartamos una desinversión importante”, informó Abia. Con todo, el foco financiero del grupo está en reducir su deuda.
En este sentido, Grifols ha iniciado conversaciones para refinanciar 350 millones de euros de un bono que vence el próximo febrero. Al margen del remanente del bono, la farmacéutica también estaría en conversaciones para extender una línea de crédito renovable de 1.000 millones de dólares con vencimiento en noviembre de 2025.
La deuda neta de Grifols se situó a 30 de septiembre en 9.208 millones de euros, de los que 8.128 millones eran deuda financiera neta y 1.080 millones, obligaciones financieras relacionadas con el alquiler de centros de plasma.
De esta forma, la compañía redujo su deuda financiera neta, según el balance presentado por la compañía catalana, desde los 9.396 millones del segundo trimestre hasta los 9.208 millones al cierre del tercer trimestre.