Grifols, nueva etapa sin Brookfield: refinanciar deuda de 1.400 millones
El reto más urgente para la farmacéutica española tras rechazar la Oferta Pública de Adquisición (opa) es refinanciar una deuda que vence el próximo año y una emisión de bonos garantizados para evitar problemas de liquidez.
28 nov 2024 - 10:09
Otras prioridades para Grifols. Tras haber rechazo la oferta de Brookfield y que el fondo canadiense se bajara de la Oferta Pública de Adquisición (opa), la compañía catalana de hemoderivados enfrenta retos urgentes de cara al próximo ejercicio.
En concreto, Grifols cuenta con una línea de crédito bancaria que vence en 2025 que deberá refinanciar por 1.400 millones de euros. Desde la farmacéutica llevan semanas trabajando en la extensión de la línea de crédito y la refinanciación de los bonos que deberá afrontar en solitario tras la cancelación de la opa, según Expansión.
Del total de la deuda, mil millones de dólares son de crédito renovable. El pasado junio, Grifols había dispuesto 625 millones de esa financiación provenientes del 20% de la venta de Shanghai Raas para devolver 300 millones. Este préstamo vence en noviembre de 2025.
Grifols aseguró no querer ampliar capital ni apoyar otras operaciones de ingreso de capital ajeno
Además, la farmacéutica, antes del verano y de que se iniciara la intención de opa, logró colocar 1.300 millones en bonos a un tipo de interés del 7,5%. En caso de problemas para financiar la deuda, Grifols debería optar por ampliar capital, lo contrario a la intención de la familia fundadora.
Tras abandonar Brookfield su intención de lanzar una opa sobre la compañía catalana, la familia Grifols ha manifestado estar “muy satisfecha y contenta” por el apoyo recibido de los actuales accionistas y aseguró que no apoyará ninguna otra operación.
La semana pasada, un Comité de Transacciones creado por tres consejeros independientes de Grifols se opuso a la oferta de Brookfield de 10,5 euros por acciones A, mientras que los títulos B se ofertarían a 7,62 euros. El plan de la familia propietaria de Grifols y el fondo canadiense pasaban por unificar los títulos.