La salud encara la recta final del año con una inflación en plano. En noviembre, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de la sanidad fue del 1,9%, según datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Con el resultado de noviembre, la inflación de la salud vuelve a tocar mínimos y encadena dos meses consecutivos por debajo del 2%. En lo que va de año, el IPC del sector fue variando entre el 2% y el 2,2%, hasta que en octubre marcó su mínimo anual con un 1,9%.
La inflación de la sanidad se volvió a situar por debajo de la inflación general española, que en noviembre fue del 2,4%, aupada por el encarecimiento de la gasolina y la luz.
Por subsectores de la sanidad, el grupo que más se encareció en noviembre fue el de los servicios ambulatorios, que registraron una inflación del 2,6% respecto al mismo mes del año anterior.
La inflación de los productos y equipos médicos fue del 1,1% en noviembre
Le siguieron los servicios hospitalarios, cuya inflación se situó en el penúltimo mes del año en un 1,9%. Los productos, aparatos y equipos médicos, por su parte, se encarecieron un 1,1% en noviembre.
El Índice de Precios de Consumo (IPC) es un indicador que mide la evolución de los precios de los bienes y servicios de consumo adquiridos por los hogares residentes en España. La encuesta tiene periodicidad mensual y se elabora a partir de la observación de 462 artículos.
A escala global, el IPC se disparó en 2022 a raíz de la guerra en Ucrania, que provocó un aumento de los precios de algunos alimentos y de la energía, aunque la subida de costes de la electricidad llevaba ya meses subiendo. Desde octubre de 2022 se ha ido moderando progresivamente el IPC.