Grifols pone en marcha su primera planta en Brasil para crecer en Latinoamérica

Grifols da un paso más en su apuesta por la internacionalización. El gigante de hemoderivados ha puesto en marcha su primera planta en Brasil para acelerar su crecimiento en el mercado latinoamericano. En concreto, la fábrica se encuentra en la ciudad de Campo Largo, situada en el sur del país.

La instalación, con una superficie de más de 5.500 metros cuadrados, cuenta con una capacidad para producir más de diez millones de bolsas para conservar componentes sanguíneos. Por ahora, la fábrica atiende las demandas de clientes locales. A través de un comunicado, la farmacéutica señala que la producción se incrementará gradualmente con el objetivo de “abastecer a la región más grande de Latinoamérica”.

Para Daniel Fleta, director de operaciones de la división industrial de Grifols, “esta nueva planta de producción permitirá al grupo aumentar su presencia en la región”. Inicialmente la producción se destinará a atender el mercado brasileño, aunque la intención de la compañía para por reforzar su presencia en otros mercados.

Grifols, que desembarcó en 1991 en el mercado latinoamericano, comercializa sus productos en 23 países de la región

La instalación de Brasil es la primera planta de producción de Grifols en Latinoamérica, donde la compañía inició sus operaciones comerciales en 1991. Actualmente, comercializa sus productos y soluciones 23 países de la región.

En paralelo, Grifols sigue desarrollando proyectos industriales para fortalecer su posición en el extranjero. Uno de los más destacados se encuentra en Marruecos, donde la compañía selló un acuerdo con el grupo Soludia Maghreb. La empresa africana, especializada en el suministro de soluciones para hemodiálisis, encargó a Grifols el diseño y construcción de los equipamientos para una nueva línea centrada en la producción de soluciones intravenosas en bolsa.