El regulador bursátil de EEUU concluye sus pesquisas sobre Grifols sin sanciones
Sí que ha advertido a la empresa catalana de hemoderivados, recordándole que corresponde a su dirección garantizar la exactitud de sus divulgaciones. Se trata de una referencia a las dudas apuntadas por el fondo bajista Gotham.
4 nov 2024 - 11:45
Grifols parece haberse librado de sanciones del regulador estadounidense. La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) ha finalizado su investigación sobre la multinacional catalana sin anunciar ninguna apertura de expediente ni sanción.
Sí que ha transmitido una advertencia a la empresa de hemoderivados, recordándole que corresponde a su dirección garantizar la exactitud de sus divulgaciones, según El Confidencial. Se trata de una referencia velada a las dudas apuntadas por el fondo bajista Gotham City Research sobre la gobernanza de Grifols.
A finales de septiembre, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (Cnmv) abrió expedientes sancionadores a Gotham y General Industrial Partners (GIP) por manipulación de mercado en las acciones de Grifols y por incumplir las previsiones del Reglamento sobre Abuso de Mercado en materia de recomendaciones de inversión, y a la compañía catalana por defectos en la información financiera y en los informes de gestión.
Adicionalmente, el organismo supervisor trasladó a la Fiscalía toda la información respecto a la posible conducta manipulativa por parte de Gotham y GIP por si hubiera lugar al ejercicio de acciones penales por posible incumplimiento del artículo 284 del Código Penal.
Grifols fue acusada por Gotham de transferir dinero a una patrimonial bajo control familiar
El fondo bajista estadounidense señaló en marzo que lo que debía ser un pago por adelantado de la multinacional de hemoderivados a Scranton Enterprises mediante otras compañías se había convertido, de facto, en un préstamo que la sociedad participada por la familia fundadora no tendría intención de devolver.
Esa vez Gotham se basó en un informe de la compañía francesa de servicios financieros Kepler Cheveaux en el que se refería un acuerdo de gestión centralizada de la tesorería entre Haema, BPC Plasma y Scranton por el que aquellas empresas con superávit concederían créditos a las que tuvieran que subsanar problemas de tesorería. Es lo que en argot especializado se conoce como cash pooling. El informe de Kepler, en concreto, señalaba 321 millones de euros en la categoría de “otros activos por operaciones vinculadas”.
Gotham sustentaba su afirmación en un ejemplo extraído del balance de Haema de 2018 publicado en el registro estadístico alemán de compañías en el que se indicaba en unas notas que lo que en el documento se refiere como una transacción de cash pooling era en realidad un préstamo, loan en inglés, un tipo de crédito que vence en más de un año y por el que supuestamente hay que cobrar intereses.
Los créditos de Haema a Scranton pasaron de un millón de euros en 2018 a 68 millones en 2022, recordaba Gotham. “Asumiendo que el flujo de caja se aproxima a los ingresos netos, es poco probable que Haema hubiera generado un flujo de caja suficiente para dejar 68 millones de euros a Scranton en el año fiscal 2022”, sostenía entonces la firma de análisis.
Para que esto pudiera pasar, seguía Gotham, Haema debería haber recibido inyecciones de dinero por parte de Grifols, algo que quedaría demostrado, según la firma de análisis, en el hecho de que Haema refiere “pagos por adelantado” por parte de la multinacional de hemoderivados que luego se canalizan hacia Scranton como parte de su acuerdo de cash pooling. La cifra relativa a préstamos a partes vinculadas de Grifols coincide con una entrada de dinero a Scranton correspondiente a 2022.
La primera tanda de acusaciones proferidas por Gotham contra Grifols ponía el foco en el hecho de que la compañía española había consolidado las cuentas de Haema y BPC, dos empresas sobre las que, supuestamente, no tenía derecho a voto.
En este informe, el fondo bajista añadía que, siendo Haema propiedad de Scranton en un 100%, con la doble consolidación, la multinacional del sector de los hemoderivados “puede transferir dinero a entidades con las que tiene cero intereses económicos para convertirlos en préstamos a Scranton”, mientras que la sociedad objeto de disputa podía alegar que estas entradas corresponden a pagos por adelantado. En el documento difundido por Gotham se indicaba, además, que Haema casi no pagaba ningún interés a Grifols por sus inyecciones.
El informe concluía subrayando una parte del informe de Kepler en el que se afirma que “el balance de crédito de Haema y BPC se compensará periódicamente cuando estas compañías declaren dividendos”. Para Gotham, esto era “dinero por nada” para Grifols y acababa preguntándose si los accionistas de Grifols están subvencionando a los accionistas de Scranton, una sociedad participada por la familia fundadora y otros directivos de la compañía española.