María Eugenia Lecumberri (Sodena): “Tendríamos que hacerlo rematadamente mal para que el ecosistema de salud quede en nada”
La directora de inversiones de Sodena, el vehículo del Gobierno de Navarra, opina que el sector de la salud “todavía está un poco incomprendido”.
14 nov 2019 - 04:58
María Eugenia Lecumberri es la directora de inversiones de Sodena, el vehículo del Gobierno de Navarra para el desarrollo empresarial de la comunidad. Fundado en 1984, Sodena ha invertido más de 150 millones de euros en empresas del sector automovilístico, agroalimentario o de alto valor tecnológico. En el ámbito de la salud, la sociedad ha cerrado inversiones en compañías como Cinfa y start ups como Ability Pharma o InnoUp. Lecumberri es licenciada en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad del País Vasco y se incorporó a Sodena en 2001. Anteriormente, la directiva fue gerente en Navarra de la firma auditora Kpmg. Para la ejecutiva, el papel de Sodena en la comunidad foral ha sido “fundamental” para atraer proyectos y evitar una fuga de talento.
Pregunta: ¿Qué papel juegan los vehículos de inversión pública en el ecosistema emprendedor?
Respuesta: En el caso de Sodena, su papel es fundamental, no sólo para impulsar el emprendimiento, sino para impulsar el desarrollo empresarial en Navarra. Las empresas que cuentan con el apoyo del capital riesgo crecen más rápido, son más rentables, crean más empleo, su actividad en I+D+i es más intensiva y su capacidad de internacionalización es más elevada.
P.: ¿En qué punto se encontraría el sector salud en Navarra si Sodena no hubiera aparecido?
R.: La industria navarra no gozaría de la misma salud. Probablemente, algunos de los proyectos desarrollados en el territorio habrían crecido fuera. Desde Sodena hemos apoyado iniciativas como el Centro de Investigación Médica Aplicada (Cima) o los laboratorios Cinfa.
P.: ¿Cuáles son las principales diferencias entre instituciones de inversión pública y privada?
R.: Más allá de la rentabilidad financiera, los vehículos públicos de inversión nos fijamos en la rentabilidad socioeconómica de las empresas que apoyamos. Medimos el impacto en términos de creación de empleo, la escalabilidad del proyecto y el impacto fiscal que puede generar en la economía de Navarra.
“Más allá de la rentabilidad financiera los vehículos de inversión pública se fijan en la rentabilidad socioeconómica”
P.: ¿Los inversores públicos toman menos riesgos?
R.: Si abordáramos el proyecto como una entidad privada, tendríamos más en cuenta nuestra rentabilidad financiera. Diría que nuestros estándares de riesgo son incluso más elevados, porque sabemos que gozamos del apoyo de la Administración.
P.: ¿Usar dinero público para impulsar iniciativas privadas genera reticencias?
R.: En Navarra se entiende. Hace más de treinta años que estamos considerados un agente clave para el desarrollo empresarial de la comunidad. Por otra parte, también estamos sometidos a la ley de transparencia y a la Cámara de Cuentas de Navarra. La gente no discute que nuestras inversiones sirven para impulsar el ecosistema económico, pero nosotros también velamos para que las cosas se hagan de la forma más correcta posible.
P.: ¿Son necesarios más vehículos como Sodena para que el sector salud explote en España?
R.: No diría necesario, pero sí deseable. Al fin y al cabo, el mayor reto pasa por impulsar un sector que sea capaz de atraer acuerdos a nivel internacional.
“No tiene sentido que surjan nuevos fondos de inversión sin una política que contribuya a activar el ecosistema”
P.: ¿Qué factores favorecen la aparición de inversores públicos?
R.: En nuestro caso, cuando nacimos en 1984, todo el Parlamento de Navarra mostró un compromiso firme con el proyecto. Vehículos como el nuestro deben disponer de fondos para operar y de un equipo profesional que entiendan el mercado y tenga una red de contactos significativa para poder cerrar operaciones de coinversión. Por otra parte, también es necesaria una red de salud pública de alta calidad.
P.: La llegada de la crisis frenó las inversiones en prácticamente todos los sectores. ¿Han recuperado los niveles de inversión precrisis?
R.: Es cierto que ahora se realizan más operaciones, pero el sector de la salud todavía está un poco incomprendido. En subsectores como la biotecnología o el desarrollo de fármacos, algunos inversores todavía no saben que las cantidades a invertir son muy elevadas y que la duración de los proyectos es más prolongada. Por suerte, cada vez existen menos inversores que se lanzan a la salud sin conocimiento previo.
P.: ¿Aparecerán vehículos como Sodena en otras comunidades?
R.: Es probable, pero el desarrollo del ecosistema no sólo pasa por esto. También debemos trabajar el deep flow del conjunto de las iniciativas. No tiene sentido que surjan nuevos fondos de inversión sin una política que contribuya a activar el ecosistema.
P.: ¿Cuál sería su diagnóstico acerca del sector de la salud en España?
R.: Es excepcional. Tendríamos que hacer las cosas rematadamente mal para que todo el ecosistema que se ha impulsado terminara en nada. En muy pocos años hemos conseguido avances brutales y vamos a seguir en esta línea.