Reino Unido compra 60 millones de dosis a Moderna para vacunar en 2022 y 2023
El acuerdo con la biotecnológica prevé la adquisición de 29 millones de dosis para 2022 y 31 millones de dosis para el año siguiente. Además, la compañía podría incluir candidatos de vacuna de refuerzo autorizados.
3 dic 2021 - 12:31
Reino Unido prepara la inmunización contra el coronavirus a largo plazo. Moderna ha anunciado un acuerdo por el que le suministrará, a este país, sesenta millones de dosis adicionales de su vacuna Covid-19 en los próximos dos años.
El acuerdo con la biotecnológica prevé la adquisición de 29 millones de dosis para 2022 y 31 millones de dosis para el año siguiente. Además, esta compañía también podría incluir candidatos de vacuna de refuerzo autorizados, según ha informado la compañía en un comunicado.
El Gobierno de Reino Unido se reserva el derecho de aumentar o disminuir su compra un 20% por encima de los volúmenes contratados. “Agradecemos al Gobierno su apoyo en este acuerdo de suministro para nuestra vacuna de ARNm y sus candidatos de refuerzo, si se aprueban, en 2022 y 2023”, ha afirmado Stéphane Bancel, consejero delegado de Moderna, tras anunciar el acuerdo.
Reino Unido se reserva el derecho de aumentar o disminuir su compra un 20% por encima de los volúmenes contratados
“Este acuerdo refleja los esfuerzos del Gobierno de Reino Unido para abordar la pandemia en curso y se basa en nuestra colaboración existente para proteger a los habitantes del país”, ha concluido Bancel.
La biotecnológica estadounidense multiplicó por 50 su facturación hasta septiembre, en comparación con los datos del mismo periodo del año pasado. Durante los primeros nueve meses del año, la compañía facturó un total de 11.260 millones de dólares. De enero a septiembre de 2020, Moderna ingresó 232 millones de dólares.
Según la compañía, el aumento de los ingresos en estos nueve meses de 2021 ha estado impulsado por el incremento de la facturación, que se deriva de la comercialización de su vacuna contra el Covid-19. La empresa con sede en Cambridge (Estados Unidos) registró un beneficio de 7.334 millones de dólares, mientras que, durante el mismo periodo del año pasado, se anotó unas pérdidas de 474 millones de dólares.