Nuevos fármacos, China e inflación: qué les quita el sueño a los directivos de GSK, Novartis y Roche
Un informe elaborado por Credite Suisse a partir de entrevistas con los principales directivos del farma europeo desvela que 2023 estará marcado por la incertidumbre, pero también por las oportunidades de negocio que aparecen en tiempos convulsos.
11 ene 2023 - 04:58
El farma europeo enseña los dientes en 2023. Tras dos cursos en los que la respuesta a la pandemia impulsó al sector, 2023 comienza con las principales farmas europeas siguiendo muy de cera los nuevos lanzamientos farmacológicos y el mercado chino, sin olvidar el aumento de precios y el desafío de adaptarse a la nueva reforma sanitaria estadounidense, según el informe EU Pharma&Med-tech Feedback elaborado por Credit Suisse a partir de entrevistas con los directivos de una decena de las principales farmas europeas.
Los principales directivos del sector señalan el lanzamiento de nuevos fármacos como una palanca para impulsarse en el mercado de 2023, marcado por la subida de precios. Sanofi hace hincapié en el estudio de las enfermedades raras, mientras que GSK busca la aprobación de tres fármacos nuevos y proseguir su investigación sobre el VIH.
Por su parte, Novo Nordisk e Ypsomed seguirán apostando por su tratamiento contra
la obesidad. También se centrará en este ámbito Roche, que planea que su medicamento contra el aumento de peso, Evrysdi, se convierta en un éxito de ventas este 2023 y le reporte 1.200 millones de dólares en ventas, a su vez que sigue investigando sobre el alzhéimer.
Este año, uno de los principales dolores de cabeza de los directivos del sector será la inflación. GSK y Novartis planean realizar una subida de precios a doble dígito debido al incremento del IPC, Ipsen asegura que se encuentra lastrada por “el control de costes derivado de la inflación”, Roche apuesta por fijar los precios de los productos y “no participar en una espiral a la baja” y Hikma Pharmaceuticals prevé una mejora en los precios a partir del tercer trimestre del año.
Otra de las palabras más repetidas por los altos cargos de las compañías farmacéuticas europeas es China. Tras abandonar la política de Covid Cero y reabrir sus fronteras más de mil días después, el gigante asiático crecerá un 4,3% en 2023, según las últimas previsiones del Banco Mundial. Coloplast confía en que 2023 la compañía vuelva a su actividad previa a la pandemia en el país, Astrazeneca define la región como “un mercado con muchas más oportunidades que riesgos” y donde la empresa se considera bien posicionada para capitalizar la innovación emergente.
Credite Suisse señala que el ‘farma’ europeo debe desarrollar sus negocios internacionales y acometer adquisiciones en el extranjero
Además, Novartis afirma que China sigue siendo impredecible a corto plazo, pero no espera volver a un crecimiento de dos dígitos hasta más adelante, un avance que calculan que se producirá “a largo plazo”. Mientras, Ypsomed lo ubica como su motor de crecimiento en 2023 gracias a sus alianzas con la industria local.
Otro mercado sensible para el farma europeo en 2023 es el estadounidense. De momento, la reforma sanitaria estadounidense ejecutada por Biden no ha modificado en exceso las estrategias de las compañías europeas e incluso Credite Suisse, elaborador del informe, asegura que el ahorro derivado de la reforma puede fomentar la compra de nuevas medicinas, aunque invita a estar alerta.
Para enfrentarse a este año de incertidumbre, Idorsia apuesta por recaudar más fondos para lanzar nuevos medicamentos, mientras que Ibsen opta por reducir los gastos de venta, generales y administrativos y Roche sitúa la investigación como el gran epicentro de la industria en 2023, comparando la próxima ola de innovación con la de los años setenta, cuando empezaron a surgir los fármacos basados en proteínas.
Para Credite Suisse, otro de los principales focos de interés para la industria europea es el desarrollo de negocios internacionales y la posibilidad de acometer adquisiciones para complementar la cartera de productos. El banco de inversión considera que la industria farmacéutica europea dispondrá de 160.000 millones de dólares en los próximos cinco años para acometer inversiones y adquisiciones.