El FMI mantiene su pronóstico para la economía española pese a la incertidumbre global
El organismo internacional mantiene su pronóstico y prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) de país se eleve un 2,8% este año y otro 2,2% en 2019.
16 jul 2018 - 17:05
Las perspectivas de crecimiento de la economía española se mantienen. El Fondo Monetario Internacional (FMI) reitera los pronósticos vertidos en abril sobre el Producto Interior Bruto (PIB) español y mantiene que registrará una expansión del 2,8% en 2018 y del 2,2% en 2019.
La previsión del FMI mejora los pronósticos anticipados por Nadia Calviño, ministra de Economia y Empresa, que manejaba unas expectativas de crecimiento de la economía española del 2,7% para este año. En 2019, el alza del PIB prevista por el FMI es dos décimas inferior a la del Ministerio, que lo situaba en el 2,4%.
De entre las principales economías mundiales, el FMI ha recortado su pronóstico de crecimiento en todas salvo España, Estados Unidos, China y Canadá. Para el conjunto de economías avanzadas, el ente prevé un alza del 2.4% en 2018, una décima menos que en abril, y mantiene sin cambios el pronóstico de 2019, cuando el crecimiento se sitúa en el 2,2%. La zona euro ha visto disminuido la previsión de crecimiento hasta el 2,2% este año y hasta un 1,9% para 2019.
España se sitúa como uno de los países con mejores pronósticos
En cuanto a los mercados emergentes, el FMI ha confirmado sus pronósticos del pasado mes de abril, con una expectativa de crecimiento del 4,9% este año y del 5,1% en 2019, manteniendo sin cambios las proyecciones para China en el 6,6% y el 6,4% respectivamente, mientras ha recortado sus pronósticos para la India en una décima en 2018 y tres décimas en 2019, hasta el 7,3% el próximo año y el 7,5% el siguiente.
En el conjunto del mundo, el FMI estima que la economía crecerá un 3,9% en 2018 y 2019, respectivamente, un ritmo idéntico al previsto el pasado abril. No obstante, el organismo liderado por Christine Lagarde apunta que los riesgos “están acumulándose”, al tiempo que indica que la escalada de las tensiones comerciales, financieras y geopolíticas puede hacer “descarrilar” la recuperación.