El Banco de España eleva una décima el alza del PIB en 2022 y aleja los tambores de recesión

El Banco de España eleva el crecimiento de la economía española. La entidad ha revisado al alza su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2022, hasta el 4,6%, una décima más que la estimada hasta la fecha. Al mismo tiempo, el organismo ha asegurado que si se cumplen las previsiones la economía española evitaría la recesión, según el Informe Trimestral de la Economía Española publicado este martes.

Sin embargo, la entidad ha rebajado una decima el crecimiento para 2023, hasta el 1,3%, ha reducido dos décimas el crecimiento en 2024, hasta el 2,7% y ha añadido que en 2025 el crecimiento del PIB se situará en el 2,1%. No será hasta final de 2023 o comienzos de 2024 cuando la economía del país recuperará su nivel de actividad previo a la pandemia.

En el cuarto trimestre de 2022 y el primer trimestre de 2023 la economía española se expandirá apenas un 0,1%, y a partir de marzo rebotará por el alivio de las presiones inflacionistas, la recuperación de los mercados exteriores y la aplicación de los fondos Next Generation.

De esta forma, España remaría a contracorriente de las principales economías de la zona euro y evitaría la recesión técnica, debido a su menor dependencia del gas ruso. Si bien, el Banco de España advierte que “es precipitado descartar ningún escenario en un contexto de tanta volatilidad”, ya que las proyecciones se basan en los supuestos de que los precios energéticos sigan descendiendo y se prorroguen las medidas anticrisis, entre otros.

El Banco de España asegura que la economía rebotará en el segundo trimestre de 2023

Pese a que el alza en los precios será “persistente” en 2023, la tasa de inflación en España se desacelerará hasta el 4,9% en 2023, el 3,6% en 2024 y el 1,8% en 2025, situándose a la cabeza de los países de Europa con menos inflación, aupados por el menor precio de la energía en el país. Pese a que la inflación se moderará, la caída en los precios de los alimentos y la inflación subyacente tardará más en producirse.

Respecto a la ocupación, el mercado laboral ha resistido en 2022, con un crecimiento de la afiliación en el tercer y cuarto trimestre y un aumento de los contratos indefinidos. Hasta final de año, el Banco de España proyecta que el desempleo se mantendrá en el 12,8%, subirá una décima en 2023 y se moderará hasta el 12,2% en 2024, hasta situarse en el 12% en 2025.

Por último, la tasa de ahorro de los hogares se ha reducido por las presiones inflacionistas desde el máximo alcanzado en el segundo trimestre de 2020, pasando del 25,1% al 8,5% y su evolución futura dependerá, en mayor medida, de la evolución de la confianza de las familias y los consumidores, así como del auge de los precios.