China dispara sus compras de vacunas ‘made in Spain’ en plena crisis por el virus

El mercado de vacunas chino mueve 3.390 millones de euros, y hasta ahora el negocio ha estado dominado, principalmente, por empresas nacionales. Sin embargo, un grave escándalo con una de las principales compañías chinas de producción de vacunas en 2018 y la reciente crisis del coronavirus pueden acabar alterando esta tendencia. En 2019, China destinó más de 45 millones de euros en adquirir vacunas españolas, y, por lo que marca el contexto, parece que la demanda exterior del país tenderá a aumentar.

Las exportaciones de la industria sanitaria de España al mercado chino se han ralentizado a lo largo de 2019 respecto al ejercicio anterior. De enero a noviembre de 2018, las empresas farmacéuticas españolas vendieron productos a China por 263,6 millones de euros, mientras que en el mismo periodo de 2019 esta cifra se redujo hasta 218,5 millones de euros, según los últimos datos publicados por el Icex España Exportación e Inversiones.  

Pese a esta caída general de las exportaciones a China, las estadísticas registran ascensos meteóricos en algunos productos en particular. Un ejemplo de ello son las vacunas destinadas al uso medicinal: si de enero a noviembre de 2018 las exportaciones españolas de estos productos al mercado chino sumaron sólo 204.790 euros, en el mismo periodo de 2019 llegaron hasta 45,5 millones de euros. Es decir, las exportaciones de vacunas se multiplicaron 222 en sólo un año.

Changsheng Bio-technology, un escándalo que cambió el rumbo sanitario de China

En China, el mercado de las vacunas está liderado principalmente por empresas nacionales, pero un escándalo en 2018 protagonizado por una de las principales farmacéuticas del país, Changseng Bio-technology, provocó que el Gobierno chino cambiase de rumbo y empezara a importar más.

Según la acusación de las autoridades chinas, el fabricante inventó los registros relacionados con una vacuna contra la rabia y ofreció vacunas de mala calidad a niños bajo el programa nacional de inmunización del país para la difteria, la tos ferina y el tétanos. En total, se administraron más de 250.000 vacunas defectuosas. Esta situación desencadenó la indignación entre la población, furiosa por que el Gobierno no hubiese detectado antes el problema.

Poco después del escándalo, en julio de 2018, la compañía Xiaodoumiao, una plataforma para reservar citas de vacunación, lanzó un informe que reflejaba la desconfianza de los padres en el sistema chino. El 36% de los encuestados entre 300.000 padres dijeron que preferían dar a su hijo una vacuna dentro del país, mientras que otro 60% afirmó que haría el tratamiento fuera de las fronteras.

Ante esta situación, el Ejecutivo chino se puso en marcha para frenar la desconfianza de la población, y promulgó una nueva ley en 2019 que aprobaba el suministro de 276,6 millones de dosis al mercado entre enero y julio de 2019. La mayoría las vacunas necesarias provienen del mercado chino, pero el país también tuvo que recurrir al mercado exterior para poder cubrir el incremento de la demanda.

Sin embargo, el gigante asiático tiene otro gran problema a la hora de importar vacunas, y es que estos productos, cuando llegan al país, tardan entre uno y cinco años en adquirir la licencia para ser suministrados. La vacuna pentavalente, la vacuna antineumocócica 13/23-valente y la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VHP) son algunos de los productos que China importa y que ya están aprobados por su agencia nacional del medicamento.

Más ascensos meteóricos en las exportaciones de España a China

Las ventas del sector sanitario español a China también han crecido en otras áreas. Las exportaciones a China de apósitos con una capa adhesiva y acondicionados para la venta al por menor han pasado prácticamente cero en 2018 a 175.940 euros en 2019. Respecto a las guatas, gasas, vendas y artículos análogos impregnados con sustancias farmacéuticas y acondicionados para la venta al por menor, han pasado de 5.580 euros de enero a noviembre de 2018 a 111.410 euros en el mismo periodo de 2019.

Del mismo modo, las exportaciones a China de medicamentos constituidos por productos mezclados entre sí, sin acondicionar para la venta al por menor, se han multiplicado por doce, pasando de 486.250 euros a seis millones de euros.

Otro aumento destacable procede de la exportación de glándulas y otros órganos opoterápicos al gigante asiático, que ha pasado de generar un volumen de negocio de 440.920 euros a 3,8 millones.

Por otro lado, también ha habido descensos pronunciados. Por ejemplo, las ventas a China de los medicamentos preparados para la venta al por menor que contienen hormonas corticosteroides han pasado de 27,8 millones de enero a noviembre de 2018 a 6,4 millones en el mismo periodo de 2019, lo que supone un descenso del 76,8%.

Lo mismo ocurre con los medicamentos preparados para la venta al por menor que contienen hormonas distintas a los corticosteroides, que han reducido su facturación en casi un 100%, pasando de 2,5 millones en 2018 a 9.410 euros en 2019.

Las exportaciones de medicamentos con antibióticos, que son las que concentran el mayor volumen de las exportaciones a China, han caído de 48,9 millones a 40,3 millones, lo que supone un descenso del 17,4%.

La conquista del mercado sanitario chino

Algunas empresas españolas e internacionales del sector sanitario han intentado afincarse en China a lo largo de estos años, y es que la industria de la salud en este país mueve alrededor de 120.000 millones de euros. Pese a ello, la fuerte intervención gubernamental en la economía y la opacidad del mercado complican el aterrizaje en el país.

De hecho, un notable grupo de farmas ha aceptado reducir el precio hasta un 60% de 70 medicamentos en China para que se incluyan en el sistema sanitario estatal. En este grupo están empresas como AstraZeneca, Sanofi, Roche o Gilead, y los descuentos afectan a algunos superventas de las empresas, como Humira, el producto estrella de Abbvie contra la artritis reumatoide.

En el caso español, hay varios ejemplos de empresas que han entrado en China. Uno de ellos es Pharma Mar, que en 2019 firmó un acuerdo con el grupo Luye Pharma para que distribuya su tratamiento contra el cáncer de pulmón en el gigante asiático. 

Un notable grupo de farmas ha aceptado reducir el precio hasta un 60% de 70 medicamentos en China para que se incluyan en el sistema sanitario estatal

El mercado chino es un escenario difícil de ignorar para las multinacionales del sector sanitario. El volumen de población (unos 1.300 millones de personas) y el rápido crecimiento de la economía ya lo convierten en un entorno económico atractivo para la inversión. Sin embargo, para el sector de la salud el interés puede ser mayor por el envejecimiento poblacional. Hoy, en China hay 180 millones de ciudadanos mayores de 60 años, y se espera que la cifra llegue a los 480 millones a mitad de siglo.