Los centros privados de reproducción asistida recortan su facturación un 5,9% en 2020

Los centros privados de reproducción asistida pierden fuelle en el año del Covid-19. Estas empresas generaron en 2020 un volumen de negocio agregado de 460 millones de euros, lo que supuso un descenso del 5,9% respecto a 2019, según el informe Centros de Reproducción Asistida del Observatorio Sectorial DBK de Informa.

Estas cifras rompen la tendencia de crecimiento en los dos años anteriores. El desecenso se debe al impacto del primer estado de alarma en la actividad, lo que implicó el cierre temporal de muchos centros y la limitación de afluencia posterior debido a los protocolos de seguridad.

El valor total de los tratamientos de reproducción asistida realizados en España se situó en torno a los 590 millones de euros en 2020. El 78% del cuál corresponde a centros especializados de titularidad privada, el 11,8% a hospitales públicos y el 10,2% a clínicas privadas.

Actualmente, España cuenta con 280 centros privados especializados y que se concentran, en un 70%, en Cataluña, Andalucía, Comunidad Valenciana y Madrid, las comunidades más pobladas. En los últimos años, existe una tendencia a la concentración como consecuencia de las operaciones corporativas lideradas por algunos de los principales operadores del sector.

En 2021, se prevé un repunte la demanda gracias a la puesta en marcha de tratamientos aplazados en el ejercicio anterior

Los cinco primeros operadores reunieron en 2019 el 56% del volumen de negocio agregado de los centros especializados. La cuota de mercado conjunta del grupo de los diez primeros superó ligeramente el 70%.

El informe prevé que, de cara a 2021, repunte la demanda gracias a la puesta en marcha de tratamientos aplazados en el ejercicio anterior. De esta manera, se espera que el volumen de negocio generado por los centros de reproducción asistida recupere los niveles alcanzados en 2019.

Además, la tendencia a la baja de la tasa de fecundidad, motivada por la ampliación de la edad media de la primera maternidad en las mujeres españolas, sigue configurando un marco propicio para que la demanda de servicios de reproducción asistida continúe creciendo.